La Tagua cornuda es una de las 13 especies de aves de la familia Radillae presentes en Chile que se distribuyen a lo largo de los cuerpos lacustres altoandinos, desde las regiones de Arica y Parinacota, hasta Atacama.
Se caracterizan por ser aves robustas de plumaje negro, con una protuberancia en la cabeza llamada carúncula. Sus patas tienen grandes garras que las ayudan en la defensa de sus territorios durante la época reproductiva y son capaces de crear nidos con plantas macrófitas, que también son su fuente de alimento.
En el caso de la Región de Antofagasta, esta ave es posible avistarla en lagunas como Miscanti, Miñiques, Helada, Loyoques y Huachalajte, que se ubican sobre los 4.000 metros sobre el nivel del mar.
Durante esta época, la tagua cornuda se encuentra en proceso de nidificación, por lo que es relevante que tanto visitantes como tour operadores de San Pedro de Atacama, estén al tanto de este hecho para cuidar y preservar esta especie que en época reproductiva puede llegar a superar los 1.000 ejemplares.
En ese sentido, el encargado de la sección de conservación de diversidad biológica de CONAF Antofagasta, Diego Sepúlveda Martínez, la tagua ‘’es una especie sumamente sensible a perturbaciones, más todavía en la temporada de postura de huevos y crianza de polluelos, por lo que es necesario tomar una conducta de respeto y no generar alteraciones cuando se visiten las zonas de descanso y nidificación. Por otro lado, en caso de encontrarse con ejemplares heridos o enfermos, el llamado es a no manipular, y se debe llamar a los organismos competentes’’.