La mañana del pasado martes comenzó oficialmente la operación en la región de Ñuble del helicóptero Kamov; aeronave especial para este tipo de siniestros y donde destaca su capacidad de levantamiento máximo de 5 toneladas, junto con alcanzar una velocidad máxima de 260 kilómetros por hora, que lo convierten en el helicóptero de doble motor más potente para cargas y que se sumará a otros recursos, tanto aéreos como terrestres, que tendrá la Corporación Nacional Forestal para el combate de los incendios en la temporada 2021 – 2022.
En esa línea el delegado presidencial de Ñuble, Cristóbal Jardua, destacó que los recursos han ido aumentando cada año, según se ha requerido. Jardua recordó además que “el año pasado lo vivimos con limitaciones a la libertad, cuarentenas, restricciones de toque de queda y eso nos favorecía a tener menos gente dispuesta a salir hacia lugares turísticos para pasar una tarde de verano, algo que da los elementos propicios para generar un incendio. Es por esta razón que la autoridad hizo un llamado al autocuidado y protección del entorno al momento de realizar visitas a los campos u orillas de rio.
Sobre los recursos que estarán presentes en Ñuble el director de CONAF, Domingo González Zúñiga, comentó que serán “4 aeronaves, 1 avión AT con capacidad de 1.300 litros de agua y un tiempo de arribo a los lugares más alejados de la región de 15 minutos. 1 helicóptero grande del tipo Kamov con capacidad de 5.000 litros de agua y capacidad máxima para transportar 9 brigadistas. Otro de los helicópteros presentes será un Bell 412, el cual transporta hasta 1.300 litros de agua, y el último es uno pequeño, del tipo B3, que transporta hasta 900 litros por descarga. Las brigadas terrestres serán 15 para esta temporada lo que se traduce en 177 brigadistas, una de ella mecanizada, con un Skidder. Esta maquinaria permite realizar cortafuegos en muy poco tiempo al momento de presentarse una emergencia”.
Cristián Sepúlveda, coordinador de los comandantes de los cuerpos de bomberos de Ñuble, explicó que bomberos ha tenido una inyección importante de dinero, traducido en carros forestales, para afrontar esta temporada “y hemos trabajado para mejorar las coordinaciones internas para prestar apoyos entre los distintos cuerpos de bomberos en caso de se requiera, lo que nos permite salvar más vidas e infraestructura crítica”.
Sobre este punto hizo hincapié Cristian Matus, director regional (S) ONEMI, explicando que las alertas rojas emitidas por el organismo dependiente del ministerio del interior se dan cuando “hay condiciones propicias de viento, humedad y temperatura o la afectación directa de una vivienda en las emergencias, como fue el caso del incendio de Coiquén, en la comuna de Ninhue”.
En materia de investigación de causas, la comisario de la PDI, Silvana Quezada, resaltó que en conjunto con la fiscalía, la UAD (Unidad de Análisis y Diagnostico de incendios forestales de CONAF) y la unidad de investigación de bomberos “desde el año 2019 la PDI ha iniciado 39 investigaciones por el delito de incendio, en donde trabajamos con el apoyo de nuestro laboratorio de criminalístico y los especialistas químicos y forestales que están en la ciudad de concepción. Lo que solicitamos a la comunidad es poder entregarnos toda la información que vieron o escucharon, lo que nos ayuda a poder realizar una mejor y más expedita investigación y con ello encontrar a los o el responsable”.