Plantando árboles con los niños del jardín infantil Karü Peumayén (verde lugar de sueños), de Conchalí, e inaugurando su Facebook, Twitter e Instagram, Forestín, el coipo símbolo de la Corporación Nacional (CONAF) y de la protección de la flora y fauna del país, celebró sus 41 años de vida, destacando que su opción por ingresar a las redes sociales es “para estar más cerca de mis seguidores: escolares, jóvenes y adultos que me ayudan en esta hermosa misión de cuidar nuestra naturaleza”.
“Siempre me ha conmovido el cariño que Chile me ha entregado. Por eso, los invito a seguirme en Facebook e Instagram en la cuenta @Forestin.Chile y @Forestin_Chile en Twitter, para que sigamos comunicándonos. ¡Agradezco a quien me dio un teléfono inteligente como regalo adelantado de cumpleaños! Prometo darle un buen uso, para estar a tono con los tiempos actuales y sumar a más personas para defender y conservar los diversos ecosistemas que tiene nuestro hermoso país”, sostuvo Forestín.
Sin embargo, este acercamiento a las redes sociales no significa que el coipo se aleje del trabajo en terreno. Durante la jornada, su celebración principal la efectuó junto a niñas y niños del jardín infantil Karü Peumayén de Conchalí, donde recibió el cariño del alumnado y docentes, además de autoridades de la JUNJI, que administra este recinto, a quienes obsequió material educativo y didáctico de prevención de incendios forestales. También lo acompañó Leo Campos, el libro corpóreo de FUCOA del Ministerio de Agricultura, que promueve el concurso de cuentos campesinos.
Junto a la directora de JUNJI Región Metropolitana, María Teresa Vío, plantaron árboles, con el compromiso de cuidarlos para que crezcan y ayuden a tener un país cada vez más verde; la directora del jardín, Alejandra Pardo; y el representante del Departamento de Ecosistema y Sociedad de CONAF, Leonardo Millalén; además de niños y niñas del establecimiento.
Para Leonardo Millalén, de CONAF, es muy “relevante celebrar un nuevo año de vida de Forestín plantando árboles y especialmente en este nuevo jardín. Además, no podemos olvidar que tenemos un convenio con JUNJI para justamente entregar árboles para los nuevos y antiguos jardines, buscando así que tanto niñas y niños, como sus docentes, conozcan el valor de los árboles, especialmente cuidándolos y viéndolos crecer. A través de los diferentes programas y convenios, desde el 2014 a la fecha hemos plantado unos cinco millones de árboles a lo largo del país”.
Cabe recordar que Forestín nació el 12 de junio de 1976, durante la Jornada de Evaluación del Programa de Manejo del Fuego, efectuada en la Región del Biobío, cuando se sugirió que la institución debería tener un símbolo para la prevención de incendios forestales. Sería en 1983 cuando el simpático roedor nativo recibió su nombre, gracias a un concurso escolar que organizó CONAF en la Región de Valparaíso.
“Tengo muchas expectativas con las redes sociales. Creo que al fin muchas personas sabrán de mi puño y letra que no soy un castor, sino un coipo, el roedor nativo más grande del país”, expresó satisfecho Forestín, mientras observaba su nuevo teléfono celular para ingresar a sus cuentas.