Hace un año, José Sáez y otras diez familias de la Villa Rehuén, de Mulchén, perdieron sus casas producto de un incendio forestal que afectó al sector. El viento imperante ese domingo 11 de enero del 2015 hizo que las llamas, que inicialmente afectaba solamente vegetación, llegaran rápidamente al sector poblacional consumiendo once viviendas. Hoy las familias afectadas esperan pronto regresar a sus casas, las que están en plena faena de construcción, gracias al SERVIU y la Municipalidad. “Estamos agradecidos porque nos están ayudando a salir adelante”, dijo durante el mediodía este vecino que, junto al Gobernador de Biobío, Luís Barceló, el alcalde Jorge Rivas, y el jefe provincial de Conaf Biobío, Rodrigo Cifuentes, hicieron un recorrido por el cortafuego que rodea gran parte de la Villa Rehuén, el cual fue construido por la Corporación Nacional Forestal y el municipio, y que está en permanente mantenimiento.
El alcalde Jorge Rivas manifestó que cada verano la comuna se ve afectada por incendios forestales, “por lo tanto, lo que estamos haciendo es trabajar de manera conjunta con Conaf, Carabineros, Bomberos, la Gobernación y los vecinos, en especial, de manera de prevenir cualquier catástrofe que se pueda generar. Recordemos que en Mulchén hubo 11 viviendas que resultaron quemadas completamente y que afortunadamente hoy estamos reconstruyendo”.
A fines del 2015, personal técnico de CONAF y del municipio comenzaron la construcción de un cortafuego en Villa Rehuén, que tiene un perímetro de cerca de un kilómetro, y junto con ello se realizó una reducción de combustible en otras áreas de la población, de acuerdo a lo informado por el jefe provincial de Conaf Biobío, Rodrigo Cifuentes. El profesional sostuvo que se ha realizado una labor contundente en el lugar, “y también estamos trabajando con la junta de vecinos del sector, a fin de que contribuyan a mantener estos trabajos y asuman también su autocuidado, en razón de que no dispongan de basuras y tengan limpios sus sectores, de modo que, si llega a ocurrir una incendio como el del 2015, éste tenga menores consecuencias”.
Los vecinos del sector no quieren que la historia se repita, es por ello que, no dudan en participar en todas las reuniones relacionadas a la prevención de los incendios forestales y en actividades de limpieza de combustible que se acumula en los alrededores. José Sáez, quien perdió su casa en enero del 2015, manifiesta que “todos los que vivimos ese incendio hasta el día de hoy quedamos un poco con el trauma. Pero estamos agradecidos de las autoridades que nos han ayudado a salir adelante, porque solos es difícil poderse superar, y ver esto que están haciendo es muy importante para nosotros. Así es que, ahora a esperar que en breve tiempo podamos regresar a nuestros hogares, para estar tranquilos, y no viviendo más con la preocupación del fuego que nos pueda afectar”.
De acuerdo al estudio sobre puntos críticos de la Región del Biobío en cuanto a incendios forestales en zonas de interfaz, realizado por CONAF, la comuna de Mulchén cuenta con cuatro sectores de alta vulnerabilidad de ocurrencia, debido a su cercanía con plantaciones forestales: Villa Rehuén, JJ Pérez, Alto O’Higgins y Villa Bilbao. En dichos sectores ya se encuentra trabajando una Brigada de Prevención de Incendios Forestales, conformada por una socióloga, un trabajador social y dos ingenieros forestales, de modo de concientizar sobre la importancia de mantener despejado de vegetación en los entornos inmediatos a las viviendas.
Desde octubre del 2015 a la fecha, en la región se ha registrado 754 incendios forestales, un 44,6% menos que el verano pasado; y en cuanto a la superficie, se han afectado 1.073 hectáreas, un 72% menos que la temporada anterior.