Personal de la Corporación Nacional Forestal (CONAF) capacitó a equipos de la Seremi de Agricultura, INIA, INDAP, CNR y la Municipalidad de Quillota en torno al funcionamiento del Sistema de Asistencia a Quemas Controladas (SAQ), plataforma digital que regula el uso del fuego en sectores rurales y de interfaz urbano forestal.
La instancia informativa, que se llevó a cabo en dependencias de la Seremi de Agricultura, en Quillota, también consideró un análisis estadístico respecto al período de mayor probabilidad de ocurrencia de incendios forestales 2021-2022, que comenzó el 1 de julio del año pasado y culminó el 30 de junio del presente.
“Buscamos incrementar nuestra capacidad operativa para fiscalizar las quemas ilegales de desechos agrícolas y forestales, y, además, promover alternativas al uso del fuego. Y los servicios del agro, en este aspecto, nos pueden ayudar muchísimo, dada la cercanía que tienen con personas del ámbito rural y campesino”, explicó el director regional de CONAF, Luis Correa.
Detalló que “los funcionarios del Ministerio de Agricultura y la Municipalidad de Quillota pueden informar a sus usuarios cómo opera el SAQ y los requisitos para ejecutar una quema controlada, a fin de evitar posibles incendios forestales o eventos de contaminación. Por otro lado, si detectan faenas sospechosas en sus recorridos, pueden denunciarlas a nuestra institución o Carabineros”.
Asimismo, Correa recordó que “si usted desea quemar en terrenos rurales, debe dar aviso a CONAF. Si no lo hace, estará cometiendo un delito y va a quedar a disposición del Ministerio Público”.
Zonas saturadas
Por su parte, el jefe de la Sección de Prevención de Incendios Forestales de la entidad, Daniel Ariz, aseveró que la provincia de Quillota y las comunas de Catemu, Panquehue y Llay-Llay, en San Felipe, “han sido declaradas zonas saturadas por material particulado MP10, que involucra el material particulado 2.5. Entonces, todo indica que se va a tener que dejar de quemar desechos agrícolas y forestales”
En ese contexto, añadió que “hay que buscar alternativas al uso del fuego, a través de algunos fomentos que tiene la red del agro. (…) Ayudar al pequeño o mediano agricultor para que pueda, de otra forma, más sustentable, hacer un manejo de esos desechos, reintegrándolos al suelo, pero con una tecnología que le permita hacerlo y que no implique estar quemando”.